martes, 21 de octubre de 2014

Bella Lucía

15 Jul 2010

Aquella tarde la brisa suave que corría en el hermoso Paseo Marítimo de Playa Blanca, me animó a correr por él.
Como siempre que corro, y me gusta hacerlo a menudo, mi mente, al contrario que mis músculos, se abandona y se relaja, recreándose en aquello que ve, y en este caso mis retinas se impresionaban con unos acantilados de ensueño que me enamoraban, y la plenitud de todo un Océano que me inspiraba libertad.
Las caprichosas formas que las piedras volcánicas torneaban a su antojo para el deleite de los paseantes se sumaban a los alicientes del camino que recorría, y me invitaban a no cesar mi trote.
Corrí y corrí, y de repente tras una bajada que mis forzadas piernas agradecieron, un sin fin de mástiles, que conformaban un puerto deportivo, se desplegaban ante mí.
Abanderado esta vez por la curiosidad, seguí trotando por entre aquellos barcos, y ya cuando las fuerzas empezaban a fallarme, me detuve en seco ante una maravillosa visión. Se trataba del velero más hermoso que jamás había visto.
Sin saber nada del mar, ni de los barcos que lo navegan, aquél navío en concreto, me secuestro el alma por largo rato. Allí detenido, mientras recuperaba el aliento que hipotecó mi carrera, no era capaz de quitarle la vista de encima.
Su dueño debía ser alguien tan soñador como yo, pero mucho más valiente y afortunado, sin duda, que estaba recuperando aquél velero del año mil ochocientos y pico.
Su casco al igual que sus mástiles se ofrecían a mi vista lijados, a falta de barniz, y aún así, nada más verlo, se me vino a la cabeza, que quisiera cuando menos soñar con él.
Pude observar en su popa su nombre, en grandes letras podía leerse " BELLA LUCIA ", y de inmediato los cansados motores de mi imaginación pusieron nombre a mi nueva fantasía, y me convertí en el capitán, aferrado al timón, y con todo un océano ante mí, cargado de aventuras. y como es mi imaginación, y la reconduzco a mi gusto, junto a mí, asida por la cintura, mi mujer, mi Santa como yo la llamo, porque hasta el día de hoy siempre participó en mis aventuras, y porque para mí es la mujer más hermosa del mundo.
Seguidamente largamos velas, y con vientos de popa que me fueron propicios, encaré la mar más hermosa de la tierra.
Luego volví a la realidad, pero no sin desear de corazón que aquel navío no se hundiera jamás, que en breve volviese a navegar, y que su piloto tuviese toda la suerte del mundo, y viviese las aventuras que dibujo a ratos en ese lienzo que es mi imaginación, y que a veces, cierro los ojos y doy pinceladas.

Me ha encantado. Hacer volar nuestra imaginación siempre es bonito y no cuesta nada. En nuestra imaginación todo es posible, por suerte.

Cierto, y lo bueno que no es necesario demasiado para que ella nos haga pasar un buen rato.
Saludos.





viernes, 10 de octubre de 2014

El amor no tiene edad

14 Jun 2010

Estaban sentados en el Paseo Marítimo de la Carihuela, bajo un cielo plomizo pero que no sofocaba el calor propio del mes que corre. Sus cabezas nevadas por los años reposaban juntas apoyándose la una sobre la otra, mientras contemplaban un mar de color cobalto con una media sonrisa en sus gestos. El, en un determinado momento cambió la vista hacia los pies de ella, que colgaban desde el muro del malecón. Lucía unas sandalias de color cuero, que parecían recién estrenadas. Ella observó su mirada.- ¿Te gustan?- Le preguntó. – Me gustan los pies que visten.- Le dijo haciendo crecer su sonrisa, con una voz templada, que casi la acariciaba, y que hizo ruborizar a la anciana. Luego añadió. – Siempre tuviste unos pies muy hermosos… de dedos delicados, y esas sandalias que te has comprado no hacen más que realzarlos-.
Me fijé en aquellos pies… eran los pies de una anciana… de talones ajados, y dedos torcidos por los estragos que causa la artrosis y la edad. Sin embargo aquel anciano con una voz sincera y tierna los adulaba, y aquella anciana se dejaba adular.
Esta mañana y en ese momento, comprendí lo grande que es el amor. Los volví a mirar y seguían observando el mar bajo aquel cielo nublado, con las caras tan felices que iluminaban, y seguro que sus corazones estaban henchidos por el amor que llevaban dentro. Aquellos amantes no habían envejecido… seguían siendo los jóvenes amantes que fueron siempre, y seguían profesándose el uno al otro el amor de siempre… un amor verdadero, tan sólido que ni tan siquiera envejece.
Estoy seguro que aquella anciana seguía siendo muy hermosa para él… tan hermosa como siempre fue, me fijé en ellos un instante más, y luego de envidiarlos, comprendí que para ellos no existía en aquel paseo marítimo inundado de gente, ninguna otra cosa que no fuera el mar en calma o los ojos del otro. Quisiera que la vida me dé la oportunidad de que el amor crezca conmigo y termine inundándolo todo, tal como el de esa pareja de ancianos.

popochan dijo
claro que no!! No hay edad para el amor!!!
siempre debemos amar.
hasta el último día de nuiestra vida.
Amigo, pásate por mi casita, que se te echa de menos,
Popochán.

Es que ando liadillo amigo popo, y os tengo muy olvidados... en cuanto pueda me paso, un abrazo.


jueves, 9 de octubre de 2014

De controladores y seres humanos

 5 diciembre 2010

La de anoche fue una extraña noche, por circunstancias muy especiales que todos conocemos, a causa de los intereses de unos u otros un buen montón de españoles sufrieron frío, sed, y lo peor de todo, la sensación de impotencia de saber que se malograban esas vacaciones que tanto habían soñado, sin ánimo de demagogia, sí, esas vacaciones que todos soñamos siempre, por insignificantes que sean, esas que nos hacen afrontar el día a día con un ápice de ilusión más del que nos produce la ya de por sí complicada supervivencia.
A lo largo de la noche todas las cadenas radiofónicas, además de continuos informativos que en algunos momentos llegaban a ponernos los pelos de punta, mencionando titulares en los que resaltaban actuaciones militares, estados de alarma, delitos que podían conllevar una pena de varios años de prisión por regirse por esa justicia del ejército, que ambas partes de esta singular contienda nunca debieron procurar, se intercalaban testimonios de afectados por esta disputa de intereses. De todos ellos, y eran muchos y sin duda escogidos por su dramatismo, se me quedó grabado uno, el de una chica llamada Anabel, que sentada en su cama, narraba desolada, como agotada, tras un día que se vio obligada a comenzar muy de madrugada, por la causa de fuerza mayor de que su madre agonizaba en un hospital de Barcelona, y que ella, habitando en una isla hubo de preparar a contra reloj un viaje relámpago para pasar junto a su madre sus últimos momentos de conciencia. Y como al final un cúmulo de contrariedades la hicieron verse abocada a estar ahora, sin poder conciliar el sueño, en una cama deshecha, llamando a una emisora de radio para encontrar algo de consuelo para su pena, ya que contaba, entera, sin llanto, pero con una voz que verdaderamente conmovía, que en esos amargos momentos se ahogaba de soledad, que no tenía a nadie cercano y necesitaba de otro ser humano que la escuchara, a quien poder contar cuanto le dolía saber que su madre moriría en la frialdad de un hospital, por causa de los intereses materiales de unos u otros.

Anabel no te preocupes que anoche fuimos muchos los que te escuchamos y no estuviste sola, yo, y estoy seguro que muchos otros oyentes compartimos tu dolor, y sufrimos junto a ti tu particular calvario.
Señores... quienes tengan la culpa de haber llegado a este extremo... ¿De verdad creen que no pudieron haber evitado todo esto?

Lo que mas indigna que quienes han negado su trabajo como controladores, no son individuos que reclaman por haberes impagos ni salarios paupérrimos, sino todo lo contrario. Quienes conocemos las realidades de paises emergentes, por ejemplo, sabemos de trabajadores que caen bajo el dominio de maffias que les esclavizan manteniéndolos en los lugares clandestinos de trabajo dia y noche , y ni siquiera les permiten salir a la calle. Son esclavos y prisioneros. Esta no es la situación de estos controladores cuyas actitudes no nos inspiran precisamente solidaridad . Sino todo lo contrario. Casi todos los años en estas fechas tenemos problemas con el transporte aéreo, si no quiebra alguna empresa , algún sector se declara en huelga, y son cientos de miles las personas perjudicadas que deben permanecer en los aeropuertos por el capricho de unos pocos .
Casos como el de esta joven que tu nos haces conocer, cuántos habrá ? Y personas que iban a ser transplantadas que perdieron su turno ? Familiares que no pudieron dar un último adiós a un pariente que falleció ?
¿Van estos controladores a resarcirnos ? Nunca. Tampoco lo harán esos nefastos políticos que mueven los hilos para que los controladores dejen de controlar, simplemente porque carecen de los mas mínimos valores éticos de frente a la sociedad que pretenden gobernar. Ninguno de ellos posee espíritu de servicio y sí unas ambiciones carentes de escrúpulos.
Cordiales saludos.

No pongo en duda las reivindicaciones de los contraladores aéreos, pero aun mas claro que eso es que por mas que tengan unas reivindaciones justas estas no pueden estar por encima de los derechos de los demás. Así como han manejado las cosas es difícil solidarizarse con ellos, al contrario, como humanos, no podemos sentir otra cosa que no sea rabia y que se nos acongoje el corazón por casos como los de Anabel; y solidarizarnos por lo tanto con todas aquellas personas que han resultado afectadas.

popochan dijo
Vivo en un país donde está prohibido manifestarse, encluso en la Red.
Pero tampoco podemos irnos al otro extremo y secundar huelgas salvajes
aprovechando la situación estratégica de la que gozamos.
Si les explico lo ocurrido a la gente de aquí... se les quitan las ganas de venir
a España. Un abrazo de tu compatriota, Popochán.

Cierto, este asunto ha cobrado una desproporción que nadie podía sospechar. Sin embargo es verdad que al final, sobre los que recae la injusticia y pagan los platos rotos del egoismo de un colectivo, y la incapacidad manifiesta de un gobierno que cada vez hace aguas en más frentes, son los mismos. Aquellos que con un sueldo escaso y con mucha ilusión aportan a este país lo que la insensatez de sus líderes les demanda. Esos pocos de mileuristas, que cada día se rompen la cara con la vida para sacar adelante una familia, y que no con pocos esfuerzos reunen un puñado de euros para poder escapar de la rutina y procurar unos días de disfrute a los suyos, esos, son a los que las intrasigencias de las dos partes arruinaron sus merecidas vacaciones. Ahora, cuando acabe para ellos la pesadilla de este puente, el recuerdo de las colas y el frío que soportaron, volverán a su rutinario trabajo y seguirán acribillados a impuesto para poder mantener a los inútiles que gobiernan este sufrido país, mientras siguen con toda su ilusión preparando sus próximas vacaciones, temerosos siempre de que cualquier otro colectivo decida mostrar sus incomodidades con el gobierno y acabe una vez mas con sus pocos días de relax.
Gracias Beatriz. Un saludo.

Es lo más triste de toda esta historia, que los más afectados sean a la vez los más indefensos. Lástima que no exista una justicia que los ampare a ellos.
Saludos ronal.

Hola Popo.
Mejor no cuentes nada, que aquí en España, si hay algo que nos sobra en estos momentos es mala publicidad.
Un fuerte abrazo amigo.

Me parece totalmente indigna la huelga de los controladores. Creo que están demasiado bien reconocidos, así que creo que sus quejas son totalmente injustificadas. Somos muchos los que estamos sufriendo rebajas en nuestros salarios, así que vengan estos privilegiados a perseguir más todavía me parece un total insulto. Las causas que alegan me parecen ridículas. Lo que espero es que, como a cualquier otro trabajador que incumple las normas de trabajo, éstos se vean sancionados en la medida de la comisión de los hechos. Un país no puede estar doblegado por unos cuantos asalariados que incumpliendo las normas que se exigen para convocar una huelga, dejan al país cerrado al exterior y a ciudadanos rehenes de sus actos. Intolerable.
Un abrazo, Jose Luís.

Tienes toda la la razón Fernando, no tienen ninguna justificación para hacer lo que hicieron, y lo peor es que muchos no lo olvidarán fácilmente.
Un abrazo.










miércoles, 8 de octubre de 2014

En el primer banco


22 May 2010

Acostumbro a escuchar con atención las noticias matinales. La, generalmente, agraciada locutora detalla con elocuencia noticias, sobre cuyo contenido podría hacer trabajar muy duro a mi pluma. Sin embargo no lo hago. Gracias a mi madre, sabia y persuasiva, que una vez, tras explicarme que la política es algo muy íntimo y desagradable sobre lo que tan sólo debe hablarse en familia, me hizo prometer que nunca escribiría sobre ello, ( y créanme que hoy por hoy estoy plenamente convencido de que está sumamente arrepentida de haberme avocado a ese compromiso, dado que es con ella, con quien me desfogo, por ser la más guerrera en la palabra, y por discrepar en ligeros matices con mis ideas, cuestión que yo me encargo de acentuar hasta límites exagerados ,hasta llevarla a un nivel de exaltación en sus desacuerdos, que termino temiendo que tal acaloramiento perjudique a sus niveles de tensión, y zanjo el tema a debatir con una broma fácil, que le haga sucumbir a su enfado y esbozar una sonrisa).
Sin embargo hay otro tema de actualidad, sobre el que se habla mucho últimamente, demasiado quizás para tratarse de una organización que entiendo que debería brillar por su humildad, y no por los distintos escándalos de que son protagonistas sus representantes.
Sí… se trata otra vez de la Iglesia.
El tema de la fe es algo que me preocupa. Sobre todo porque reconozco que aún hoy no he sabido posicionarme al respecto. Pero es mi lucha interna y personal y a nadie más que a mí puede afectar. Estoy seguro que después de todo no seré el primero que tarda toda una vida en descubrir a su Dios, a mi manera, y de un modo pleno.
No obstante de la Iglesia si que he sacado muchas conclusiones, y en su mayoría no muy favorables.
No puedo resistirme a pensar que el Vaticano es una multinacional creada para obtener dividendos, y que el alto clero que lo rodea no son más que sus ejecutivos más agresivos.
Pero lo que en realidad me exaspera es como su tropa, (muchos de esos curas que tienen repartidos por el mundo, que se han acomodado en parroquias, y son adulados por intransigentes parroquianas, de esas que piensan que la que fornica desnuda acaba conociendo el infierno de Dante), van haciendo la guerra por su cuenta enarbolando prepotencia y egocentrismo, en nombre de ese Dios, que estoy seguro que de existir no puede ni verlos, pero que no dudan en mencionarlo como parapeto para sus dudosas acciones.
La última… la escuché la otra mañana en el noticiario. Un sacerdote, como siempre al abrigo de la feligresía local, decide ser protagonista de una nueva atrocidad en nombre de Dios, y eso es muy especialmente lo que mueve mi crítica, que se aprovechen de la fe, y la buena voluntad de los creyentes para imponer su voluntad. Que apelen a lo sobrenatural para amparar sus pequeñas fechorías. Francamente me cuesta mucho callar y mirar hacia otro lado cuando los seres humanos sufren por causa de tanta imbecilidad y tanta intransigencia.
Resulta que una hermosa joven, coronada reina de las fiestas de un pequeño pueblo de Toledo, se le niega ocupar los primeros bancos de la iglesia, como es costumbre, por ser islámica.
Vamos a ver… es que no se expresarme bien cuando me ciega la ira… querido ministro de Dios… si tú… el que te niegas… que no sé cómo te llamas y en estos momentos no hay nada en este mundo que me importe menos que eso, tú has sopesado que puede pensar esa chiquilla de nosotros los católicos… que va a pensar de nuestro Dios, sino que es absurdo y embustero. Querido sacerdote, ( y que conste que hago un soberano esfuerzo por canjear mi ironía por todas las palabras mal sonantes que no puedo evitar, se me paseen por el entrecejo en estos momentos),donde está la humildad que predicaba Jesucristo… donde sus palabras de amor y transigencia… cual es el catecismo de todo a cien que te dieron a estudiar en el seminario… como crees que se sienten con tu valiente causa tus compañeros, los misioneros que se juegan la vida para dar un vaso de agua a un niño, y enseñarles el padrenuestro, importándole un bledo su raza o religión, y a los que insultas y menosprecias con tu arrogancia.
Vuélvete a la sacristía, a engatusar a viejas y sacarles las limosnas con tu verborrea, la Iglesia no te necesita, y con Dios ya saldarás cuentas, sin embargo la sociedad y tus superiores deberían, cuando menos amonestarte.
Lo siento mama… sé lo que me espera… pero es que no me he podido callar.


José Luís, entio tu "cabreo"; sólo me queda decirte que estoy de acuerdo con lo que dices y que con la Iglesia hemos topado...aunque siempre haya personas decentes en ella.
Un abrazo.

Cierto amigo Fernando, pero eso es en realidad lo que me duele, que la labor de esos decentes que de empañada por los que no lo son tanto.
Un abrazo amigo, y perdona que haya tardado tanto en contestarte.







lunes, 6 de octubre de 2014

El marco digital

09 May 2010

Tengo sobre mi escritorio un marco digital. Nadie se lo planteó así nunca, pero creo que es un bonito legado que hace la tecnología al mundo de los sentimientos.
En él aparecen retazos de gran parte de mis recuerdos… de momentos inolvidables, fotos de personas que compartieron conmigo el pasado y dejaron en mí una huella imborrable.
Me hace feliz encontrarlo cuando llego abatido del trabajo… cada día, de manera indistinta y azarosa, me presenta en la pequeña pantalla que conforma su marco una nueva imagen… una etapa de mi vida pasada, algún prójimo que la compartió, o incluso mi Santa, que aparece contrariada por ser víctima de una foto robada, sin el previo ritual que precisa una pose como dios manda.
El destello de esa imagen en la oscuridad de mi escritorio me hace detenerme y pensar sobre la representación de turno.
Hoy, como habitualmente, me detengo unos minutos parado delante del marco con el dibujo de la foto reflejado en mis retinas, y al poco reacciono y rememoro sobre el sujeto protagonista del día. Una leve carcajada mental, de esas que se producen pero no se exteriorizan, se me viene a la cabeza. Se trata de mi tío… mi Tío Joaquín.
No debiera provocarme la risa su recuerdo, porque ya falleció, pero fue tanto lo que en su vida nos hizo reír y disfrutar que simple hecho de recordarlo ya me alegra el alma hasta ese punto.
La instantánea es de pocos años antes de su muerte, ya andaba aquejado de una enfermedad cardiaca, y su cara se ve un matiz desdibujada, sin embargo su sonrisa… esa que permanece en mis recuerdos es tan especial como lo fue siempre.
Mi tío fue un hombre que por uno de esos errores de Dios, no fue bendecido con hijos, y esos huérfanos del limbo que no llegaron a ser nacidos no podían imaginar que pedazo de padre era el que se perdieron.
Mis hermanos y yo nos aprovechamos de ello, él nos instaló en su corazón como si fuésemos sus propios hijos, y nosotros lo quisimos como se quiere a un padre. La vida junto a él era maravillosa, cada vez que venía a pedirnos prestados a nuestros progenitores, nosotros, nerviosos de felices que éramos, por ser conscientes que daríamos un arañazo a nuestra infantil monotonía, corríamos a sus brazos. Era un dios de la broma fácil, las que nos hacían reír de niños, y supo crecer en su humor y adecuarlo a nuestras edades, y hasta el último día de su vida tuvo el temple suficiente para comportarse como toda su vida, hacernos felices y arrancarnos sonrisas. Recuerdo aquél treinta y uno de diciembre en que fuimos a visitarlo, ya muy desmejorado, y nos despidió con una de sus bromas. Pocas horas más tarde nos comunicaron su fallecimiento.
Debo agradecer a ese marco de fotos que de vez en cuando me lo presente… sin embargo el de mi Tío es un recuerdo que jamás me abandona, y que me hace ser mejor.


Entrañable escrito en recuerdo de tu tío, por lo que cuentas una persona que supo vivir la vida disfrutándola. Aunque los recuerdos siempre nos acompañan, el marco digital ayuda a ello.
Un abrazo, José Luís.

lolita dijo
tantas veces que te metes conmigo y nos reimos ( unas veces con mas gracia que otras). hoy me has hecho llorar. besitos. la pini pon

envoltura dijo
Leer tu texto tan cercano y afectuoso es recordar a nuestros tios/as que nos trataban con mucho cariño y, guardamos el mejor recuerdo de ellas/os. Bonito relato. Saludos.

Carisdul dijo
No todas los niñ@s tiene la suerte de tener titos como el tuyo y el que yo tuve. Esos mimos son inolvidables, dan lo que no han podido dar como padres pero multiplicado por mil.
Como siempre, me has emocionado.
Besos, José Luis.

Cierto Fernando, supo disfrutar de la vida, y nos enseñó a disfrutarla a nosotros.
Un abrazo.

Casi siempre me meto con gracia eh¡¡¡ Pini. Lamento haberte hecho llorar.
Un beso.

Claro que sí, amigo libertadveinte... mucho... pero mucho más importante que ser tito... je...je.
Un abrazo amigo.

Me alegra que te haya gustado envoltura.
Besos.

Es verdad Carisdul, sólo algunos somos afortunados.
besos para ti también amiga.

popochan dijo
Yo no me traje ninguna foto de mi familia a China cuando me vine,
necesitaba dar un paso al frente.
Y ahora me alegro, todo el timepo que habría perdido llorado mirando esas fotos
lo he ganado riéndome, amando y creando.
Las anclas en el pasado
NUNCA te dejan navegar.
Popochán.

Popo es que a mi mirar las fotos no me hace llorar, al contrario me hace sonreir, además los recuerdos no son anclas son la materia prima para construir la vida.